La escritura de una casa se refiere a la escritura pública de la compraventa del inmueble, y es un documento en el que participan tanto el vendedor como el comprador, con la intermediación de un notario que actúa como fedatario público.
Los gastos notariales que se derivan de la compraventa de un inmueble dependen del número de copias de la escritura, de su extensión, del asiento de presentación y sobre todo, del precio que aparece en las escrituras de la vivienda.
No obstante, los honorarios de los notarios, también denominados aranceles, están regulados por el Estado por el Real Decreto 1426/89 de 17 de noviembre, publicado el 28 de noviembre en el BOE (Boletín Oficial del Estado), eso quiere decir que se paga lo mismo por los mismos servicios, en este caso de otorgamiento de escritura pública, los precios varían entre los 600? y los 875?, dependiendo del precio del inmueble.
En cuanto al Registro de la Propiedad, también están fijados por normativa y su cuantía depende del precio del inmueble. Esta cuantía corresponde con la inscripción de las escrituras tras la firma del notario y oscila entre los 400? y los 600?.
Para realizar la inscripción en el registro se pueden hacer de varias formas:
- De manera telemática, en formato digital, vía online, a través de un notario.
- En papel, con una copia autorizada por el notario.
- Personalmente (el propio comprador).
La forma más recomendada según el Consejo General de Notariado de España es la primera, ya que así se otorga la garantía y la tranquilidad de la inmediatez, evitando cualquier otro posible documento en el proceso.
Para saber cuánto valen las escrituras de una casa, debes valorar los siguientes gastos:
- La escritura pública de compraventa a través de una notaría.
- La inscripción en el Registro de la Propiedad, ya sea a través del mismo notario o con un registrador de la propiedad.
- Los distintos impuestos, que varían según cada Comunidad Autónoma.
- La plusvalía municipal, que debe abonar el vendedor del inmueble.