Cuando decidimos adquirir una vivienda, en primer lugar solemos decantarnos entre piso o casa. Dependiendo del presupuesto que tengamos y de la zona elegida deberemos decantarnos por una u otra opción, una casa en el centro de la ciudad suele ser caro y con muy poca oferta.
Al buscar piso no solo nos fijamos en factores como la orientación, si son interiores o exteriores, la zona, los servicios cercanos sino que también valoramos la altura y, dependiendo de esta, si el edificio tiene ascensor o no.
En un edificio con ascensor, según vamos subiendo de altura el precio suele ascender también alrededor del 3%.
Si el presupuesto nos limita, una planta baja puede ser una opción muy atractiva pues, en igualdad de condiciones, suelen ser más económicas que las plantas superiores. La accesibilidad también mejora pues el hecho de estar a pie de calle, sin escaleras y ascensores facilita el día a día de personas mayores, familias con niños y personas con movilidad reducida sea esta permanente o temporal. Además, para muchos es un privilegio no tener que esperar el ascensor.
Las viviendas en la planta baja con frecuencia tienen un patio que, aunque la mayoría de las veces pertenece a la comunidad, el vecino sí que está autorizado al uso y disfrute del mismo. Una gran oportunidad para los que quieren tener una pequeña zona verde en casa o una zona de recreo dentro de casa.
Algunos bajos en urbanizaciones cuentan con pequeñas terrazas que se convierten en una extensión de la vivienda donde disfrutar del exterior en los días cálidos, son muy buscadas por las familias con niños.
Lo peor de esos patios es que al estar a pie de calle no ofrecen tanta intimidad como los pisos superiores.
Muchos bajos que en su origen no estaban diseñados como vivienda han sido adecuados para tener este destino. Muchos lofts utilizan antiguos locales comerciales en el centro de la ciudad. El espacio abierto, los techos altos ofrecen unas oportunidades que no están al alcance de un piso común pues se puede colocar el dormitorio en diferentes alturas sin renunciar a un espacio amplio y diáfano.
Pero antes de aventurarte en convertir un local u oficina en loft recuerda que debes cumplir con la normativa y realizar un cambio de uso.
En nuestro catálogo puedes encontrar bajos tanto con jardín como sin patio propio.